Los efectivos policiales de la Policía Bonaerense denunciados ante la Fiscalía de Miramar por haber "torturado, amenazado y secuestrado" a un adolescente de 17 años militante de los derechos del colectivo LGBT (Lesbianas, Gays, Bisexuales y Transexuales), serán desvinculados de esa fuerza, informaron fuentes del Ministerio de Justicia bonaerense.
Desde esa cartera precisaron a Télam que en el momento y lugar en que se sucedieron los hechos "había ocho efectivos de servicio", mientras que según la denuncia realizado por la víctima y su familia fueron tres los involucrados.
"Habrá una rueda de reconocimiento y las tres personas que sean reconocidas por el joven agredido serán desvinculadas de la fuerza", aseguraron los voceros de la cartera de seguridad.
Por su parte el Instituto Nacional contra la Discriminación, la Xenofobia y el Racismo (Inadi) anunció su intención de constituirse en parte querellante o "amicus curiae" en la causa.
"Así como estuvimos hace unos días en Mar del Plata articulando con organismos nacionales y provinciales para poner fin al accionar neonazi, nos comprometemos a estar presentes acompañando a Lautaro y su familia, con la voluntad de constituirnos en parte querellante y/o 'amicus curiae'”, expresó su interventor, Javier Buján.
Según la denuncia, la noche del sábado Lautaro Blengio y un grupo de amigos fueron parados por personal policial durante una requisa y averiguación de antecedentes en la zona costera de la ciudad.
Al dar negativo el pedido de prontuario, el joven preguntó por el número de identificación del patrullero, "momento en que el oficial que dio la orden de una nueva requisa lo sujetó del cuello, golpeándole la cabeza contra el auto", precisaron fuentes judiciales.
"Este oficial profirió amenazas, tales como 'pendejo, yo no te conozco ni vos a mí, te voy a desfigurar la cara a piñas y te voy a tirar en el vivero'", indicó la denuncia de la presunta víctima, a quien también "se le retuvo el documento que nunca fue devuelto", igual que su teléfono celular, que le fue retenido "cuando intentó sacarle una foto al policía".
Lejos de terminar allí, cuando Blengio se dirigía ayer a la mañana a su domicilio, "un vehículo lo interceptó, bajando del mismo un hombre que a punta de pistola se anunció como policía y lo introdujo en el automóvil, manejado por otro individuo", señaló la denuncia.
"Esa persona fue identificada por el damnificado como el oficial policial que ya lo había amenazado", indicaron allegados del adolescente en un comunicado.
Una vez a bordo del auto, el supuesto oficial se dirigió al Vivero Dunícola Florentino Ameghino, donde lo hizo descender y le infringió "cortes con navaja en la zona del abdomen, además de quemarlo con cigarrillos y amenazarlo de muerte con frases como 'ahí te voy a fusilar' señalando un cruz realizada con tajos en el pecho del menor", precisó la denuncia.
En el hecho interviene la fiscal de general Alvarado, Ana Caro, quien dijo a Télam que dispuso una custodia de efectivos de Prefectura en la vivienda del menor, además de las pericias de rigor para determinar "si las quemaduras y marcas o cortes en el cuerpo son las correspondientes al período que relata la víctima".
"Ahora lo que estamos haciendo es investigar la denuncia que realizó el adolescente, se trata de constatar, certificar y reunir todas las pruebas y elementos contra los uniformados que hayan participado de las amenazas o agresiones físicas que denuncia el menor", añadió.
También se están analizando todas las cámaras de seguridad de la ciudad y de algunos comercios, "para ver si pueden aportar datos para la causa, que está caratulada como '"apremios ilegales'", agregó.
El joven fue atendido en el hospital municipal de Miramar y según fuentes de la guardia se constató que las quemaduras que tiene corresponden a las que produce un cigarrilo, en tanto que el corte superficial producido con un elemento cortante no sería reciente.
El padre de la víctima, Daniel Blengio, relató esta mañana a la prensa que su hijo milita en diferentes organismos "defendiendo derechos humanos y sociales" y que "este verano sufrió permanentemente acoso por parte de la fuerza policial", por lo que pidieron un recurso de amparo preventivo "para evitar que le pase algo más grave, pero la jueza Florencia Hogan lo rechazó diciendo que no estaba en peligro".
Asimismo, desde la agrupación 100% Diversidad y Derechos repudiaron el hecho y se comprometieron "a seguirlo de cerca, ya que lamentablemente no se trata de un caso aislado sino que se enmarca en un clima político e institucional de violencia y desigualdad".
Fuente: Télam
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