La Secretaría de Salud Municipal solicita que los consumidores tengan precaución cuando adquieran alimentos en general y especialmente tengan el cerdo como principal ingrediente. La advertencia se extiende a los productores y médicos veterinarios.
La Triquinosis es una enfermedad de denuncia obligatoria. Recomendaciones para consumidores, elaboradores, faenadores y criadores de cerdos.
A los consumidores se les aconseja controlar el rótulo o etiqueta de fabricación en todos los subproductos elaborados con carne de cerdo que se adquieran y no comprar aquellos que no se encuentren debidamente identificados.
La Municipalidad de General Pueyrredon (Mar del Plata / Batán ) por medio de su Secretaría de Salud informa a la población las medidas de prevención de triquinosis al encontrarnos en época de faena de porcinos con destino a la elaboración familiar de las tradicionales “facturas de cerdos”.
Desde la Dirección de Protección Sanitaria recuerdan que la Triquinosis es una enfermedad zoonótica causada por el consumo de carne cruda o mal cocida de animales, fundamentalmente de cerdo (embutidos, chacinados, salazones), infectados con larvas del parásito llamado Trichinella.
La prevalencia de la triquinosis está altamente relacionada con la costumbre de criar cerdos a base de desperdicios sin tratar (restos de cocina) de los hogares y del posible contacto de los animales con portadores del parásito, por ejemplo con las ratas.
El rol de la rata toma importancia en el hábitat doméstico, estando ésta con frecuencia infectada con T. Spiralis, manteniendo la infección y actuando como huésped reservorio y vector al transmitirla a los animales domésticos; es por esto que es fundamental eliminar la presencia de roedores del hábitat donde se realice cría de cerdos.
Las larvas de Trichinella Spiralis enquistadas en el tejido muscular del animal ingerido son liberadas en el estómago del hombre; migran hacia el intestino donde maduran y pasan a las arterias y a través de la circulación general llegan a los músculos dónde quedan enquistadas .
El cuadro clínico en el ser humano es muy variable y puede ir desde una infección asintomática hasta una enfermedad fulminante y mortal, dependiendo del número de larvas ingeridas y del estado inmunológico del huésped.
La aparición repentina de molestias y dolores musculares, el edema de párpados y la fiebre son signos tempranos característicos y comunes.
Los síntomas abdominales tales como dolor gastrointestinal intenso, nauseas, vómitos y diarrea suelen aparecer una o dos semanas después de la ingesta de la carne infectada.
La triquinosis también puede producir intolerancia anormal a la luz y un estado de decaimiento similar al de la gripe. Si la infección es grave; la persona podría presentar problemas de coordinación, así como trastornos cardíacos y respiratorios.
Es necesario que la población tome conciencia que esta enfermedad puede prevenirse con medidas sencillas de fácil adopción.
Datos a tener en cuenta a la hora de adquirir este tipo de productos
A los consumidores se les aconseja controlar el rótulo o etiqueta de fabricación en todos los subproductos elaborados con carne de cerdo que se adquieran (por ejemplo, salamines, bondiola, panceta, etc) y no comprar aquellos que no se encuentren debidamente identificados.
Las inscripciones que deben constar en la etiqueta son : Nombre y Dirección del Establecimiento Elaborador, Fecha de Elaboración y Fecha de Vencimiento.
Además, no hay que consumir productos elaborados con carne de cerdo en forma casera, a menos que se tenga la certeza de que el cerdo ha sido analizado por un profesional responsable. Finalmente, hay que cocinar hasta que desaparezca el color rosado (más de 70°C) cuando se consuma la carne de cerdo fresca.
Medidas Preventivas para cada parte de la cadena
Para los criadores:
ü Los cerdos deben ser criados en instalaciones adecuadas sin presencia de roedores.
ü Debe evitarse alimentarlos con basura, desperdicios de mataderos y/o residuos de casas de comida/ restaurantes, ya que en ellos puede haber restos de alimentos contaminados con el parásito.
ü En el criadero, eliminar los cadáveres de cerdos y otros animales para que no puedan ser consumidos por otros cerdos, ratas ni animales carnívoros.
ü En caso de realizar la faena casera de sus cerdos para consumo propio, se debe
verificar mediante un análisis de laboratorio (digestión artificial) que la carne
no esté infectada con el parásito.
ü Tener en cuenta que la salazón, el secado y el ahumado no matan a la T. Spiralis.
Para el consumidor:
ü Consumir siempre carne de cerdo y sus productos derivados (embutidos y salazones) faenados y/o elaborados por establecimientos autorizados para tal fin por la Autoridad Sanitaria competente y fiscalizados por la misma.
ü Adquirir solo productos que posean rótulo verificando el nombre del establecimiento elaborador y sus datos así como la habilitación de Autoridad
Sanitaria competente
ü Se recomienda no consumir productos caseros excepto que los mismos hayan
resultado negativos a los análisis de laboratorio (digestión artificial).
Aquellas personas que elaboren productos con carne de cerdo deberán realizar, previamente el análisis de la misma, con el objeto de asegurar que no se encuentre contaminada, debiendo recordar que el salado, ahumado y/o secado de los productos no matan al parásito, si lo destruye la cocción realizada por encima de los 70º C.
Cuando se faenen cerdos para la elaboración de embutidos de consumo familiar, realice los análisis, que le avalen un consumo seguro; a tal efecto consultar al Departamento de Zoonosis, teléfonos 465-2518 - 465-2510.
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