En el marco del octavo foro de Participación de la Ley Provincial de Parto Respetado y Creación del Plan Estratégico, la directora de Equidad y Género de la Provincia de Buenos Aires, Sabrina Balaña, indicó que 3,5 de cada 10 partos en la Provincia son cesáreas; y en la Región Sanitaria VIII la cifra se duplica y va en aumento.
El camino al parto respetado tiene muchos ejes por trabajar, entre ellos la sobre intervención y subestimación de la persona gestante por parte de los equipos de salud. Mariana Larroque, diputada provincial e impulsora del proyecto, recordó que la Provincia adhirió a Ley Nacional de Parto Humanizado el pasado año, pero que solo se trata de un punto de partida en la transformación del paradigma del modelo del parto y el puerperio.“Tenemos una ley nacional sancionada desde el año 2004 y sin embargo muchos derechos siguen sin garantizarse”, resaltó.
El plan provincial, impulsado por Larroque y trabajado intersectorialmente junto con el ministerio de Salud provincial, con la participación del ministerio de Mujeres, Políticas de Género y Diversidad Sexual; así como de los organismos provinciales, de los colegios profesionales, de los equipos de salud, de la comunidad científica y de las organizaciones de la comunidad, plantea concientizar sobre derechos y brindar capacitaciones tanto para el personal profesional como administrativo de las instituciones sanitarias de toda la Provincia.
A la vez, ese mismo plan contempla la realización de estos foros con el objetivo de enriquecer este proyecto de ley, abriéndolo al debate y recibiendo los aportes de los diferentes actores. Hasta el momento, se llevan realizados ocho encuentros, con participación promedio de 200 personas por foro.
El encuentro tuvo la participación del ministro de Salud Nicolás Kreplak, quien felicitó a los integrantes del foro y reconoció su labor “en la implementación de este derecho que nos debíamos en la Provincia de Buenos Aires, de tener un sistema de salud inclusivo que garantice el parto respetado”. A la vez, los felicitó por “el trabajo de construir una planificación estratégica integrada e inclusiva que permita que todos y todas estemos participando de decidir cómo nuestro sistema se va a adaptar a los tiempos que debe y merece nuestra ciudadanía”. Por su parte, la ministra de las Mujeres, Políticas de Género y Diversidad Sexual de la Provincia, Estela Díaz destacó que es “una excelente iniciativa la de debatir en la sociedad una legislación que se va a sancionar pero que además va a ser política pública”.
Los foros se realizan mensualmente en las distintas regiones sanitarias que componen el sistema provincial, el del día de ayer tuvo como protagonista la Región Sanitaria VIII. Durante su exposición Balaña señaló que la mesa intersectorial y la realización de los foros en cada región sanitaria se corresponde con la decisión prioritaria del Estado de jerarquizar los derechos de las personas gestantes y garantizar partos respetados.
La sobreintervención del sistema durante el parto
Durante su exposición, Balaña indicó que “un parto seguro es un parto respetado, y que cuando hablamos de parto respetado hablamos de modelos de atención, de formas de vincularnos y de cuáles son los roles de las personas que participan en ese escenario”, y al respecto, señaló que es “muy necesario repensar los roles, ya que las protagonistas de esa escena son las mujeres, son las personas gestantes, son las familias, y eso es un cambio radical”.
“Nuestro rol como equipo de salud es acompañar, cuidar, sostener, informar y garantizar que suceda ese parto en condiciones adecuadas, pero no siendo los protagonistas, sino los y las que acompañamos”. Aseguró que se debe garantizar que la persona esté acompañada con quien quiera estar, que haya un vínculo temprano con el recién nacido, y que se respeten los tiempos subjetivos del parto.
Respecto de esta arista, Balaña informó que la Provincia tiene una tasa de cesáreas del 35%, la cual varía entre los municipios y regiones. Por su parte, la región sanitaria VIII tiene una tasa de cerca del 60% y en aumento. Es decir que 6 de cada 10 mujeres tienen una cesárea en esa región. “Una cesárea innecesaria genera mayor daño, genera dificultades en el vínculo, mayor dolor, mayor tasa de infecciones, internaciones más prolongadas, consecuencias en el recién nacido, respecto a la prematurez, al bajo peso, a problemas respiratorios.” Y, además, no ha demostrado disminuir ni la mortalidad ni la morbilidad. “Es una práctica a la que tenemos que ponerle el ojo fuerte, que nos muestra el intervencionismo médico sobre el cuerpo de las personas gestantes”, explicó.
Otra de las prácticas señaladas por la médica es la episiotomía, una práctica que se promedia en el 46% en toda la Provincia, mientras que en esa región se realiza en 8 de cada 10 mujeres. “Es una práctica que debería ser excepcional, pero es rutina”, indicó. A saber, la episiotomía, nació para prevenir desgarros durante el parto, sin embargo, durante los últimos años, la Organización Mundial de la Salud ha comenzado a informar que por el contrario, genera mayores desgarros, y luego conlleva problemas en la sexualidad: “es un rol nuestro también pensar que la sexualidad es parte de la salud”, afirmó.
Por otro lado, el acompañamiento durante el parto en la región sanitaria octava tiene una curva similar al de toda la Provincia, cerca del 40%. “Durante la pandemia, la única figura que no se privilegió para evitar contagios fue el familiar acompañante. No había ninguna indicación durante la pandemia de no permitir acompañante. Con los cuidados necesarios, no aumentaba la probabilidad de riesgo. Por el contrario, la figura del acompañante se debe jerarquizar, ya que está demostrado que minimiza la tasa de cesáreas”, explicó.
Respecto al cuidado prenatal, Balaña indicó que es un dato positivo en la Región sanitaria VIII, porque se tiene una menor proporción de personas que no tienen ningún control prenatal al llegar a la maternidad, y lo mismo ocurre con el cuidado prenatal precoz, con un promedio del 52%.
Por último, la funcionaria recordó que en los 8 foros que se han realizado hasta ahora, el dato constante que se repite, también en la región octava, es que el 60% de las mujeres que paren en la Provincia de Buenos Aires no estaban buscando ese embarazo y un 65% no usaba ningún método anticonceptivo.
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