Luego de haber circulado desde la semana pasada la versión que el Secretario del Honorable Concejo Deliberante de General Pueyrredon, Arquitecto Antonio Costantino, sin que se conociera que lo dicho se efectivizara a través de los carriles correspondientes, finalmente la Presidenta del Cuerpo Vilma Baragiola la habría ingresado aunque nadie certifica haberla visto.
Cabe recordar que dicha renuncia supuestamente sería el resultado de la cámara oculta presentada a la Fiscalía por el Sindicato de Camioneros quien se presentó ante una denuncia de la Unión Cívica Radical por los dichos de la titular del mencionado gremio Eva Moyano quien ofuscada había manifestado que le habían pedido colaboración y se habían comprometido a votar favorablemente la desafectación patrimonial del chalet que posee la entidad en Falucho y Santa Fe.
Desde el inicio de la Democracia en el 83, es la segunda vez que un Secretario Legislativo renuncia. La primera (también radical él) fue de José Fernández, durante la Presidencia de Néstor Saggesse (1983-1985), pero en este caso para ocupar un lugar en el Ejecutivo.
Debemos recordar también que tuvo que renunciar oportunamente de la Presidencia Pascual Scotti (1989-1990), por un escándalo que si bien no había sido partícipe pero involucraba a un colaborador directo, él decidió asumir la responsabilidad y alejarse.
La renuncia de Costantino deberá ser aceptada por el Cuerpo (que fue quien dio oportunamente su aval para ocupar el cargo) pero deberá llamarse a una Sesión Especial a sólo efecto de nombrar su reemplazante.
El actual Subsecretario Norberto Pérez, no podría reemplazar al saliente Secretario, ya que el Reglamento Interno del HCD no contempla dicho cargo, por lo tanto no posee las misiones y funciones que lo habiliten. Si bien, por “olvido” de dejar sin efecto la Unidad de Ejecución por la cual se debita su sueldo (muy superior al del Secretario) continúa sentado en un escritorio, no puede ni firmar el remito del que entrega los botellones de agua para los dispenser.
Vilma Baragiola aún continúa siendo la Presidenta, y busca apoyos para seguir siendo, los que van sufriendo fugas cada vez que se conocen nuevos pocos pero letales segundos de aquella cámara oculta que originó la crisis institucional que vive el Concejo.
Esta es la situación que se vive hoy en el deliberativo, a sólo cinco meses de que el radicalismo recuperara su administración y festejara pensando que era el trampolín para la intendencia.
De ninguno de los involucrados se puede decir que sean nuevos en la política, y por ello se les embrolló la partida. Quizás sea justamente “las viejas mañas” las que los metieron en este sainete. Los integrantes de los otros bloques les exigen acciones que solucionen la crisis institucional que les pega de rebote.
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