La Secretaría de Cultura presentó un plan de tareas a desarrollar, que fue aceptado por los trabajadores. Incluye la renovación de los equipos de frío y calor en la biblioteca, el arreglo del ascensor, la reparación de baños y de las filtraciones del techo
Los problemas edilicios en el centro cultural Osvaldo Soriano y la Biblioteca municipal son de larga data. En los últimos años hubo diversas protestas y paros, y también promesas que no se cumplieron. Desde principio de este año, el Sindicato de Trabajadores Municipales -de acuerdo a las elevadas temperaturas- implementó medidas de fuerza dado que no funcionaba el aire acondicionado en el sector de la Biblioteca. A ello, sumaron otros reclamos por deficiencias de infraestructura que terminó con la retención de tareas.
Desde el último fin de semana, se plegó el centro cultural y se cancelaron las funciones previstas. La situación comenzó a normalizarse recién este martes a la tarde, después de que los trabajadores aceptaran un plan de obras propuesto por el Ejecutivo municipal, a través de la Secretaría de Cultura.
Hugo Poli, secretario de Prensa del STM, expresó que además de la falta de aire acondicionado, denunciaron “filtraciones en el techo y caída de mampostería que se fueron agravando con el tiempo”.
Las medidas de fuerza, recordó, comenzaron el pasado 8 de enero. “Recién ahora nos ofrecen un plan de obra, pero tenemos que ver de qué manera ponerlo en marcha sin resentir el funcionamiento del lugar”, sumó.
“Hace años que ni la biblioteca ni el centro cultural tienen inversión, sólo hemos visto parches que con el paso del tiempo también se deterioran”, mencionó Poli.
Luis Reales, secretario de Cultural municipal, coincidió con el diagnóstico, y reparó: “De acuerdo al volumen de dinero y de trabajos que hay que hacer, no es una cosa que se resuelva en 48 horas”.
“El edificio -sostuvo- tiene problemas antiguos. Durante mucho tiempo se hicieron reparaciones, a las que podemos llamar vulgarmente ‘parches’ en los equipos de frío y calor. Esos equipos están obsoletos”.
Y añadió: “Este verano tuvimos la información concreta de parte de la Ingeniería Municipal, de que ya no tienen reparación, que ya no existen algunos repuestos, que el sistema de cañerías a través del cual funcionan también está colapsado. Por lo tanto, hay que cambiarlos por equipos nuevos, con otro sistema, de menor consumo y de mayor efectividad”.
Para ello, mencionó Reales, se requiere una inversión grande, con pliego y licitación. “Son cosas que llevan mucho tiempo porque hay una burocracia necesaria atrás de eso para que no exista ningún acomodo con ninguna empresa. Y además es una obra larga y compleja: implica el paso de caños, la colocación de los equipos”, aseveró.
De todas maneras, el funcionario afirmó: “Entendemos el reclamo. No sólo los bibliotecarios tienen que tener equipos de frío y calor, sino también la gente que asista a la biblioteca”.
Dentro del plan de obras que fue propuesto a dirigentes gremiales y horas después aceptado por los trabajadores, se incluye el arreglo del ascensor -que ya tiene orden de compra-, la reparación de los baños y de las filtraciones. Para ello, en las próximas 48 horas comenzará a trabajar el Enosur y se decidió también nombrar una persona para mantenimiento: “Las filtraciones no son tantas por los daños del techo, sino porque se tapan las canaletas, el agua desborda y se mete así por cualquier lado”, explicó el funcionario. Cada uno de los trámites ya está en curso.
Reales decidió hacer un apartado para responder a algunos artistas que –a raíz de la suspensión de las funciones durante el fin de semana por el paro sorpresivo de los Trabajadores Municipales-, cuestionaron la política en el área de cultura de la actual gestión. “Vamos a reprogramar las fechas, y vamos a conversar con ellos, porque lo merecen y lo necesitan. En el momento en que eso sucedió, el Sindicato de una manera sorpresiva decretó el paro de todo el edificio: no sólo la biblioteca, sino también el centro cultural. Mientras nosotros estábamos reunidos con el Sindicato, había otra gente llamando a los elencos para avisar que se había suspendido, pero no se llegó a todos. Algunos fueron y se encontraron con el lugar cerrado, y no había nadie que se pudiera hacer responsable de esto”, explicó el titular de Cultura.
Al respecto dijo: “Hicieron declaraciones un poco subidas de tono, en relación al interés de esta gestión por los espacios culturales”. Y enseguida recordó que se abrieron espacios culturales como la Torre Tanque, la Fragata, la Glorieta, además de la Plaza del Agua, Villa Victoria, Villa Mitre, el Centro Cultural, el Teatro Colón, con artistas marplatenses, en todos los rubros: teatro, danza, música.
“Que por un paro, que duró un fin de semana, nos digan que a nosotros no nos interesa la cultura, es un poco mucho”, cuestionó Reales, quien mencionó también en que se compró la Casa del Puente, que será un espacio para la cultura, y se está trabajando en la Vieja Usina, que ya entró en periodo de licitación.
Si bien dijo entender “la calentura del momento” de los actores que sufrieron la postergación de sus presentaciones, reparó: “Una de las personas que se quejó y dijo que al Municipio no le interesan los espacios culturales, también recibió subsidios durante mucho tiempo para el Festival Iberoamericano del Teatro, y este año también lo va a cobrar”.
Redacción El Atlántico
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