Los fabricantes de calzado, textiles, juguetes y cuero motorizan el remplazo de las compras al exterior con un impacto en la defensa del empleo y en la creación de riqueza. Línea blanca, motos y maquinaria agrícola, siguen en la lista.
Los sectores sensibles de la industria nacional se afirman en el proceso de sustitución de las importaciones impulsado por la administración oficial del comercio exterior. En tanto, otras industrias como la automotriz, la minera, la metalurgia y la metalmecánica, se preparan para remplazar importaciones por otros U$S 510 millones en el mediano plazo.
Así lo comprobó Tiempo Argentino en diálogo con referentes de las industrias del calzado, juguetes, textil y cuero, que este año sustituirán importaciones por U$S 376 millones. En tanto, también surgieron datos de las producciones de motovehículos, línea blanca y maquinaria agrícola, que también son protagonistas del proceso en marcha.
Desde la Cámara de la Industria del Calzado (CIC), el secretario Horacio Moschetto, explicó que gracias a los mecanismos de control del comercio exterior, "este año van a entrar 20 millones menos de zapatos del exterior; unos U$S 120 millones que va a captar la industria argentina". En 2001, la fabricación extranjera controlaba el 70% del mercado.
En el área de los juguetes las importaciones se redujeron un 46% entre marzo de 2011 y marzo de 2012. En un mercado que mueve U$S 196.692 millones al año, la sustitución por juguetes de producción nacional es de U$S 90,4 millones.
Asimismo, en el sector textil, "en los primeros cinco meses de 2012 la importación de toda la cadena bajó al 15%", según el titular de la Fundación Pro Tejer, Marco Meloni. La cadena textil mueve cerca de U$S 4.000 millones "con lo cual la recuperación de la industria nacional con un crecimiento del 4 al 6% debería traducirse en unos 150 millones de dólares", estimó. A fin de año, vaticinó el referente de Pro Tejer, los productos nacionales van a dominar el 80% del mercado.
En cuanto a las manufacturas de cuero, la producción nacional sustituyó desde 2007 la importación de 34,5 millones de unidades. En el primer semestre, las compras al exterior cayeron un 21% interanual, lo que se traduce en U$S 16,7 millones que cubrieron los fabricantes locales. El titular de la Cámara de la Industria de las Manufacturas del Cuero y Afines (CIMA), Daniel Donikián, expresó sobre este tema que "es clave incrementar la sustitución de manufacturas específicas de cuero, donde la Argentina puede ser competitiva, ya que hoy los fabricantes nacionales reciben sólo el 15% del cuero nacional y a precios internacionales". Por otra parte, estadísticas de la Cámara de Concesionarios de Automotores de la República Argentina, marcan un incremento de la participación de motos nacionales en el mercado interno. De los 2,4 millones de unidades operadas en 2011, el 67% (1.608.000 motos) provino de fábricas argentinas. En 2008, las importadas copaban el mercado con una presencia del 98 por ciento.
El repunte de la producción nacional, de acuerdo a lo que consideraron los sectores consultados, se produjo a partir de la entrada en vigencia de mecanismos de control de las importaciones como las Licencias No Automáticas y las declaraciones juradas anticipadas de importación (DJAI), que administra la Secretaría de Comercio Exterior a cargo de Beatriz Paglieri. Aunque en otros casos citaron también mecanismos como los créditos del Bicentenario o el mero financiamiento por iniciativa privada.
Según datos del Ministerio de Industria, esos mecanismos –que incluyen también medidas antidumping para frenar el ingreso de productos a precios muy bajos– beneficiaron también a sectores como la producción de artículos para el hogar (conocida como línea blanca, actualmente en marcha con un 100% de insumos nacionales); maquinaria agrícola (donde lo nacional constituye un 54% de lo producido); automotrices (de fuerte interacción con la metalmecánica local); la industria del vidrio; la producción maderera; electrónica; y láctea, entre otros. Entre las pymes, además, un 38% dejó de usar partes importadas, según la ministra de Industria Débora Giorgi.
Al margen de la sustitución real, también existe una potencial relacionada con las industrias automotriz, minera y, en especial, de la metalúrgica y la metalmecánica, dos sectores que pugnan por ganar terreno en la interacción con los demás actores de la industria nacional. De acuerdo con cálculos y estimaciones de Industria, en permanente interacción con los distintos sectores, el sector automotriz tiene posibilidades de sustituir por U$S 100 millones al año, igual monto que los aceros especiales; la industria minera, en tanto, planea remplazar bienes importados por U$S 1000 en los próximos cinco años; y los fabricantes de máquinas herramienta, remplazarán productos del exterior por al menos 60 millones en los próximos 12 meses. A pesar del impacto positivo, las políticas que acompañan el proceso de sustitución generan reacciones dispares. "Una parte de las industrias está contenta por el buen rebote, otra parte ve muy complicada la operatoria, tanto que en las plantas a veces hay discontinuidad", explicó un dirigente de la industria metalúrgica, aunque sin referir casos puntuales.
Juan Cantarela, titular de la Asociación de Fábricas Argentinas de Componentes (AFAC), recordó que desde fines de 2010 los fabricantes de componentes desarrollan un trabajo intenso con las automotrices "pero desarrollar piezas acá lleva al menos un año de trabajo", señaló. Para Cantarela, en los próximos meses "se va a observar un mayor nivel de sustitución, que hoy, si bien existe, no es masiva en la balanza" del sector.
Fuente: Tiempo Argentino
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