Un cuarto de los argentinos declara conocer casos de bullying o acoso escolar, principalmente perpetrado a sus conocidos y familiares, y en menor medida a sus propios hijos y amigos de sus hijos, según datos arrojados en una reciente encuesta realizada por TNS Gallup Argentina. Sin embargo, los propios encuestados no se reconocen a sí mismos como víctimas de bullying.
El estudio se realizó a través de 1015 entrevistas cara a cara y es representativo de la población adulta argentina.
La variedad de colores surgió a la hora de proponer medidas. La opinión mayoritaria expresó que debería priorizarse una mayor relación y más diálogo entre padres y maestros, y en segundo lugar, más disciplina en el hogar.
En línea con lo anterior, para la amplia mayoría de los argentinos la responsabilidad de prevenir el bullying es de los padres, y en menor medida de los maestros y el Estado.
Respecto de la calificación de los casos conocidos, la gente expresó que "exclusión, burlas, chismes, golpes, humillaciones y robos".
En cuanto a quiénes fueron las víctimas de estos maltratos, se mencionó principalmente a conocidos como amigos, compañeros, vecinos (30%), y en la misma proporción a familiares –sobrinos, hermanos, nietos– e hijos de amigos (30%).
Luego aparecen amigos de mis hijos con un 18%, mis hijos (14%), casos vistos en televisión (4%), y por último, el propio entrevistado (1%). «
preocupa al 90%
Son las mujeres las que más conocen situaciones de bullying (un 31% contra un 19% en los hombres). El conocimiento también es mayor en los entrevistados menores de 50 años y los de nivel socioeconómico alto (34%). Los bajos registran un 24% y los residentes del interior del país (el 29%, contra el 18% del GBA y el 16% de los porteños).
El tema es de amplísima preocupación, ya que nueve de cada diez entrevistados declararon eso, siendo seis de cada diez los que plantearon que este tipo de maltrato los preocupa mucho y tres de cada diez quienes dicen que les preocupa bastante. Además, si bien la preocupación es mayoritaria en todo el país, el interior y el Gran Buenos Aires se muestran más sensibles con el 89% y un 85% frente al 76% porteño.
Fuente: Tiempo Argentino
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