Así lo sostuvo Carlos Vega, presidente de la empresa social que conformaron los exempleados del frigorífico, luego de que la Cámara de Senadores rechazara el veto a la Ley de expropiación
A casi un año del inicio de las gestiones, el frigorífico Sadowa finalmente quedó en manos de la cooperativa conformada por lo extrabajadores, quienes habían quedado desempleados tras el cierre de la empresa, años atrás. Es que, luego de varias idas y vueltas -que incluyeron la aprobación de la Ley de expropiación seguida por el respectivo veto de la norma por parte del Ejecutivo bonaerense- la Cámara de Senadores de la provincia de Buenos Aires rechazó esta semana el veto del gobierno de la provincia y declaró la utilidad pública y sujeta a expropiación de los terrenos y del inmueble, para que de aquí en más sean los mismos trabajadores quienes reinicien la actividad.
Horas después de haberse hecho público el rechazo que Senadores le dio al veto del gobierno de la provincia a la Ley de expropiación del frigorífico Sadowa, el presidente de la cooperativa Recuperar, Carlos Vega, acompañado por algunos trabajadores, dialogó con El Atlántico y aseguró estar “contento y regocijado”.
“A veces no encontramos las palabras: en estas circunstancias tuvimos muchos avatares y este un triunfo enorme de todo el grupo humano”, comenzó diciendo Vega, para luego agregar que lo único que siempre pregonaron desde la cooperativa ha sido el trabajo.
“Hoy están las pruebas a la vista: sale una ley que ya había sido vetada, se rechazó el veto en el Senado y apostamos a poner en marcha el frigorífico; este es un desafío muy grande a partir de ahora”, sostuvo el trabajador.
En ese sentido, el presidente de la cooperativa se mostró optimista respecto al camino que les toca emprender y afirmó que desde la empresa social ya tienen un cronograma de trabajo para implementarlo y llegar al consumidor, de modo que se pueda pagar un menor precio de la carne, y así apostar a recuperar el mercado perdido por el frigorífico.
“Hoy pensamos en el consumo y de ahí proyectamos no sólo a la ciudad sino también a la provincia, de la mano del Estado. Por eso resulta fundamental que las autoridades nos den su apoyo para salir al mercado y autoabastecer a la comunidad, sin olvidar que este un frigorífico muy grande y modelo”, consignó Vega.
Tras destacar que este triunfo fue sólo posible porque las gestiones fueron muy transparentes, el trabajador resaltó que lo único que priorizan es que la gente pueda tener una fuente de trabajo, para que cada persona “tenga su sueldo cuando entre al frigorífico y así avanzar y progresar”.
UN CAMINO SINUOSO
Ante la consulta acerca de por qué consideran que tuvieron tantas trabas y dificultades para poder aprobar esta norma, el presidente de la cooperativa simplificó la cuestión y la resumió en una frase: “somos trabajadores y sabemos lo que eso implica”.
Según comentó, en la actualidad quien se dedica a la labor diaria “siempre está postergado porque se cree que no tiene espalda empresarial”.
Por eso, y para romper con ese prejuicio, los trabajadores sostuvieron: “hoy podemos decir que pese a todas las incertidumbres llegamos a concretar en menos de un año una Ley de expropiación y la futura compra de un frigorífico; esto quiere decir que hicimos el camino bien, con gente que creyó en nuestro proyecto, porque anhelamos la dignificación del trabajador, que es sólo posible cuando este puede trabajar”.
En esa misma línea, y con ese objetivo en marcha, Vega resaltó que Mar del Plata necesita más fuentes de trabajo y a eso se apunta. “Tenemos un proyecto de trabajo, queremos incluir a la Provincia y buscamos trabajar mancomunadamente con el Estado, codo a codo”, aseguró, para luego agregar que cuando los trabajadores estén finalmente dentro del frigorífico, “la sociedad va a ver que se va a poder llevar adelante un emprendimiento de trabajo y autogestión”.
Por último, y de cara a los próximos pasos para comenzar esta nueva etapa, el presidente de la cooperativa expresó orgulloso que van a ingresar “por la puerta grande”. “Ya no hay impedimento alguno, esto ya es una Ley y tenemos todos los derechos que nos corresponden”, afirmó.
En ese sentido, Vega adelantó que los próximos diez días van a ser de ansiedad -aguardando las firmas necesarias- pero que los trabajadores están entusiasmados y es cuestión de esperar sólo un poco más. “Somos 70 los que vamos a ingresar y hay una lista de 150 personas preparadas para trabajar, además de otros casi 400 aspirantes que no saben del oficio pero tienen mucho empeño. Hoy queremos generar trabajo, que se mantenga la familia, progresar y darle a la comuna tranquilidad, que era lo que estábamos esperando todos”, finalizó.
EL PAPEL DE LA LEGISLATURA
“Estamos muy agradecidos con los diputados que nos apoyaron, porque ellos vieron la falta de trabajo en la ciudad y se dieron cuenta de que nosotros podemos generar trabajo y a eso apuntamos”, manifestó el exempleado de Sadowa.
Asimismo, Vega tampoco olvidó la actuación de los legisladores del Senado, quienes, a su parecer, “también entendieron la problemática, porque sin trabajo no se puede subsistir”. En la misma línea, el presidente de la cooperativa recordó que, por ejemplo, particularmente en Diputados no conocían a nadie y, por eso, golpearon muchas puertas, aunque no siempre fueron las acertadas.
“La unión de los trabajadores y la presencia en la carpa las 24 horas fueron esenciales y sabíamos que esas eran las leyes del juego, pero decidimos seguir”, afirmó el trabajador, respecto a la lealtad y compromiso de quienes hoy conforman esta empresa social.
Tras sostener que inicialmente nadie había pensado que los trabajadores iban a poder a llegar a este resultado, Vega afirmó: “hoy tenemos la gran suerte y la dicha de decir que en la provincia de Buenos Aires se recuperó un frigorífico de Mar del Plata”.
“Ese frigorífico -continuó- va a ser puesto en marcha y se va demostrar que los trabajadores tenemos el ímpetu del progreso”.
Fuente: Diario El Atlántico
No hay comentarios:
Publicar un comentario